104. contra

Cómo será
No sentir nada por ti


Mi madre me escribe para pedirme una espumadera, un cuchillo, un encargo en el chino, algo de la farmacia.
Mico me escribe solo para pasarme el resumen de la tarjeta de crédito.

Dos vínculos que no quisiera conservar. O no así. No en esta forma. No desde esta distancia que simula cercanía.

Quisiera una madre que me cuide. Quisiera una amiga que no me crucifique.

La psicóloga me pregunta si conocí a alguien en la facultad. Si me estoy juntando con algún grupo. Le digo que no, que no quiero. Pero no es del todo cierto. Me gustaría, solo que ya no creo en la permanencia de nadie.

Estoy cansada de perder amistades que creí eternas. Gente que, al desaparecer, ni siquiera creyó necesario decir adiós.
Ni una palabra, ni una razón. Solo el silencio.

Sofía. Sol. Camila. Valeria. Mico.
Nombres que duelen más por lo que prometieron que por lo que fueron.

Recuerdo la lista que hizo Leo G. sobre mí: pros y contras. Un contra: no tiene amigos.

¿No tengo amigos?

Está Flor. Es mi hermana, aunque no llevemos la misma sangre. Es más que una amiga. Es... el espejo sin deformaciones. Mi alma gemela, si se permite la cursilería. Nunca sentí eso con nadie más.

Los hombres no cuentan. Ninguno.
Jamás conocí uno que se acercara sin una intención de fondo.
A la mayoría los llevé a la cama. O ellos me llevaron.
¿Qué clase de amistad puede crecer en un terreno así?

En las cursadas tuve grupos. Vínculos funcionales, pero no eran amistades. Como tampoco lo eran los amigos de mis ex.
He compartido mi alma con muchas personas, pequeñas astillas, destellos. Pero hago el duelo por ellos apenas los conozco. Me acostumbro de entrada a que un día se irán.

Pienso en mamá, sola.
Pienso en Gerardo.

¿Dónde estará mi hermano? ¿Qué partes de su vida me estoy perdiendo?
Ger fue mi amigo. El mejor hombre que conocí.
Y también él me condenó.

Intento.
Todos los días, intento.
Intento seguir. Intento creer. Intento no apagarme.

D.