86. bronca

Éste es el proceso común de un matrimonio. Un joven y una doncella se conocen por azar o por artificio. Intercambian miradas y cumplidos y regresan a sus casas para soñar el uno con el otro. Como tienen poco en que distraerse o en que pensar, se encuentran incómodos cuando están separados y, en consecuencia, concluyen que serán felices juntos. Se casan y descubren lo que sólo su ceguera voluntaria les ha impedido ver; desgastan sus vidas en altercados y culpan a la naturaleza por tal crueldad. Sucio de mierda, pienso cuando veo los platos dejados de ayer. Andate, salí, sacá ese reel de mierda en repetición que me está volviendo loca, basta. Basta. Basta. Sólo maldiciones florecen en mi mente cuando despierto, como si estuviera poseída por esta casa que nunca pude hacer mía. Tus ideas de mierda de traer gente, de romper el baño y dejar la obra parada durante meses, de dejar que el polvo se acumule hasta en los zócalos. No entendes que si también vivo acá quiero un poco de paz...