64. filia

keeping the lights on in this forsaken place Recién compré algo de ropa para el nuevo trabajo, me siento mal por papá que me ayudó el mes pasado a comprar las camisas que necesitaba para el puesto que había conseguido en el centro de diagnóstico. Es curioso, siempre siento un dejo de culpa cuando gasto en algo para mi, pero esta vez es un tanto más molesta. Todavía no le dije a papá que cambié de trabajo. Pero tampoco es que hablemos mucho. Él mantiene cierta distancia, como si tuviera que proteger algo que no sé si sigue existiendo entre nosotros. Nuestra relación es como un intercambio constante de decepciones suaves, un vaivén en el que nos fallamos sin escándalos. Lo mínimo indispensable . Ya habrá tiempo para decirle (los compromisos obligan a eso), tan solo espero recordar agradecerle por las camisas. Estos días pensé mucho en mamá. En lo que tuvo que soportar. En el peso acumulado de existir con una hija al costado. Me vino a la cabeza cuando llegó la fac...